Juan Ramos de Lora
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Fray Juan Ramos de Lora, (Los Palacios y Villafranca (Sevilla), 23 de junio de 1722[1] - † Mérida, 9 de noviembre de 1790), fue un misionero franciscano, primer Obispo de Mérida y de Maracaibo y fundador de la Universidad de los Andes, la primera de Venezuela.
[editar] El misionero
Antes de llegar a Venezuela, Ramos de Lora ya había pasado 16 años en Sierra Gorda y 4 en California en labor misionera y era amigo del confesor del rey.[2]
Al constituirse la Diócesis de Mérida por la Bula del 17 de febrero de 1778, Fray Juan Ramos de Lora fue designado primer obispo de la nueva diócesis por el rey Carlos III el 31 de agosto de 1780, siendo aprobado por el Papa Pío VI el 24 de septiembre de 1782. Ramos de Lora fue consagrado en Puebla de los Ángeles (México) en diciembre de ese mismo año. Llega a Maracaibo el 16 de marzo de 1784 permaneciendo en esta ciudad casi por un año. El 26 de febrero de 1785 llega a Mérida, fundando el Seminario de Mérida el 29 de marzo.
[editar] El obispo reformador
Al llegar a su nueva diócesis, Ramos de Lora se ve enfrentado con la Diócecis de Bogota por la jurisdición de Pamplona, lo cual le llevó a un prolongado litigio, que costó a la diócesis de Mérida 7.660 reales de vellón, según el apoderado del obispo en Madrid; esto a pesar de que la jurisdición de Mérida sobre la demarcación de Pamplona había sido previamente estipulada.[3]
En Mérida se encuentra el obispo con una situación de deterioro en del prelado que se reflejaba en la insuficiente preparación del clero, su concentración en las áreas urbanas con el consecuente abandono de las zonas rurales y una evidente afinidad a los negocios terrenales; la raíz del problema se encontraba en el aislamiento de la provincia y la distancia que la separaba de Caracas, a cuyo obispado perteneció hasta 1784 más en teoría que en la realidad. Ramos Lora tratará mediante dos tipos de medidas, de contrarrestar esta situación: primero reformar el maltrecho clero existente, y segundo el establecimiento de un seminario y colegio tridentino, destinado a la formación de futuros sacerdotes donde se haría hincapié en disciplinas como latín, teología y gramática.
Las reformas efectuadas en Mérida aún influyen en las características culturales de la ciudad; Ramos de Lora es una figura emblemática y presente de la misma.