Sangre de cristo
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Hay siete cosas a las que el Espíritu Santo se refiere como las «Prioridades de Dios». El siete significa que procede o viene de Dios. Revisa estas verdades, alimentese de ellas, nútrase, medítelas una y otra vez, persiste en ello, porque son tan vivas y reales para ti, y están de acuerdo y son apoyadas completamente por la Palabra de Dios.
Primera Prioridad: la Sangre de Jesucristo La sangre de la nueva alianza o pacto con los hombres, todo el nuevo testamento o pacto gira alrededor de ésta sangre, San Lucas 22:20 “… ésta es mi Sangre del nuevo pacto que será derramada por vosotros para anular o perdón de los pecados, la sangre de Cristo acercó a Dios a los hombres y es el medio por el cual los hombres pecadores se pueden acercar a Dios.
Cada mensaje de Dios apunta al "sacrificio de Jesucristo” lo que significa Salvador Ungido. Su sangre es importante para Dios, porque las exigencias de justicia, del castigo del pecado han sido satisfechas, la justicia de Dios ha sido aplacada, y el historial de pecados borrado por medio del derramamiento de ésta sangre, Dios nos perdonó en Cristo.
¿Por qué tuvo que ser aplacada la ira de Dios? Tenía que haber algo que recibiera el justo castigo o condenación eterna, porque el pecado de éste mundo infringía su perfecta justicia. El derramamiento de la sangre de Jesucristo desvió el castigo de la mano divina de caer sobre nosotros, Jesucristo pagó las exigencias del juicio de Dios por nuestros pecados.
Cuando Jesucristo fue al cielo, roció con su sangre todo lo que había allí. El libro que contenía el registro de nuestros pecados, nuestros fallos y nuestra incapacidad para cumplir fue también rociado, al haber pecado es evidente que no pudimos obedecer, por eso nos envía su Espíritu Santo para que nos ayude a cumplir. El libro del antiguo pacto contenía las exigencias de Dios.
Pero en el nuevo Pacto, El puso la ley en nuestros corazones. Ya no es «no harás esto o aquello», sino.«¡Haz esto!». Esta hermosa verdad la subrayo y tiene que ver con el perfecto y completo sacrificio de Jesucristo, no con la lucha de nuestros problemas diarios.
Muchos creyentes saben que el registro de todas las cosas entre ellos y Dios ha sido puesto en orden, pero se preocupan por las cosas que pasan entre hombre y hombre, Dios también ha (verbo en pasado) borrado esto del libro; esto no significa que no debamos tratar o procurar arreglar los problemas o ponernos a paz con los hombres, “En cuanto dependa de ti, esté en paz con todos los hombres.” En 1ª de Juan 1:8 y 9, dice: “Si decimos que no tenemos problemas con el prójimo mentimos y la verdad de Dios no está en nosotros, pero si nos arreglamos o ponemos a paz con el prójimo, Dios es fiel y justo para perdonarnos y la SANGRE de Cristo nos limpia de toda maldad.” Ésta es la aplicación correcta del texto y la idea que da el escritor, de lo contrario habría contradicción con otros textos de la Biblia, porque Dios es luz y no confusión.
En el primer pacto, El recordaba todo pecado e iniquidad, cada año había que realizar el rito de la Gran Expiación, quedando libre por un año. En el segundo pacto, dijo, no recordaría ya las iniquidades porque han sido borradas por la sangre de Cristo. Jesucristo sufrió la muerte por cada persona librada de la esclavitud y paga del pecado. (Hebreos 2:9.), si Dios olvida nosotros no debemos estar recordándole a la gente sus pecados.
La sangre de Jesucristo ha sido considerada como insignificante por muchos. Algunos han llegado a decir que la sangre que derramó en la cruz no tiene más efecto que la que había sido vertida de su cuerpo durante su vida; pero Dios dijo que la sangre de Jesucristo era tan importante que ni una sola gota era perdida. Es la única sangre de la que se ha dicho que es incorruptible, sin mancha. Éste era el plan de Dios. En Libro a los hebreos 12:24, el Espíritu Santo dice: «La sangre del esparcimiento que habla que da testimonio mejor que la de Abel». La sangre tiene un lugar para siempre, ¡por toda la eternidad!
El capítulo 23 de Levítico, donde Dios da a Moisés los planes para el tabernáculo, un modelo en miniatura de su plan total. Allí, se ve que ordena cada una de estas prioridades para nosotros hoy, relacionándolas con cada uno de los festivales que Dios dio a Israel hace varios años. 1. PRIORIDAD: LA SANGRE DE JESUCRISTO, FESTIVAL LA PASCUA DEL SEÑOR Esta fiesta era un «tipo» o símbolo de la muerte de Cristo, su sacrificio, y la sangre de Jesucristo, que es tan preciosa delante de Dios. Fue planeada antes de que Dios hiciera la Tierra.
Podemos establecer la relación entre la sangre de Jesucristo y la Pascua; el hilo de la historia de la redención de Dios podemos seguirlo por toda la Biblia: ¡éste es su plan! La liberación de los hijos de Israel fue posible cuando los dinteles y los postes de las casas fueron rociados con sangre, para cubrir o proteger aquellas personas, aun cuando todos eran pecadores, del ángel destructor, que mataba a los primogénitos de todas las otras en que no estaba la sangre, Nuestra Pascua (libertad y Protección) fue provista cuando Jesucristo roció con su sangre los libros de los cielos para proporcionarnos libertad y protección contra nuestros pecados, de modo que fuéramos aceptables a Dios y hechos parte de su familia eterna.
La primera de las prioridades que se da fue acerca de la SANGRE DE JESUCRISTO, y la primera de la lista de las siete festividades para el Señor era la PASCUA DEL SEÑOR.
La Sangre de Cristo es más poderosa que el pecado por cuanto tiene poder para borrarlo; ¡la Sangre de Cristo es nuestra victoria!
Dios limpia continuamente con la sangre de Cristo e a los Creyentes.