Pongo de Manseriche
De Wikipedia, la enciclopedia libre
Este artículo o sección sobre geografía necesita ser wikificado con un formato adecuado a las convenciones de estilo de Wikipedia. Por favor, edítalo para cumplir con ellas. No elimines este aviso hasta que lo hayas hecho. ¡Colabora wikificando! |
En su recorrido estos cursos de agua se han enfrentado a las condiciones del relieve y han formado, dependiendo de las circunstancias, desde amplios cauces hasta cañones profundos. En ocasiones, cuando por la fuerza de la pendiente un río logra atravesar la cordillera, conforma lo que en el Perú se denomina pongo (palabra derivada del quechua punku, que quiere decir "puerta").
Los pongos revisten una gran utilidad porque por lo general son los canales de agua que permiten conectar dos cuencas. De esta forma, siguiendo sus aguas se han podido integrar territorios, a veces dispares.
De todos los pongos que existen en el Perú, tal vez el más conocido es el pongo de Manseriche. Éste es el último obstáculo que debe enfrentar el río Marañón en su intento por alcanzar la llanura amazónica. En su recorrido de oeste a este, el Marañón va recibiendo aportes de distintos ríos, en especial de los afluentes por el norte, pero el de mayor importancia es el gran río Santiago. Antes de Manseriche, el Marañón ostenta un cauce cuyo ancho varía entre 250 y 400 metros, pero a medida que empieza a travesar los doce kilómetros de cordillera, empieza a estrecharse hasta que aparecen las paredes casi verticales del pongo que oscurecen el cauce en los cuatro kilómetros de la parte central de su recorrido. En este punto, el ancho es de sólo 35 metros, lo que lo hace especialmente peligroso por los remolinos o muyunas que suelen formarse. Cuando el río Santiago (afluente del Marañón en el inicio del pongo de Manseriche) incrementa su caudal debido a las lluvias en las cabeceras de su cuenca, el caudal del Marañón también se incrementa, y con ello atravesar el pongo se hace muy peligroso. En las paredes rocosas al inicio del pongo, hay marcas pintadas por lo lugareños que indican hasta qué punto es seguro atravesarlo.
La primera noticia del pongo de Manseriche data de 1558, cuando un grupo de expedicionarios españoles en busca del mítico Dorado se dejó arrastrar por la corriente. La expedición estaba comandada por Juan Salinas Loyola. En 1619, el pongo es atravesado por el capitán Diego Vaca de Vega. En 1693, el padre Samuel Fritz, sacerdote jesuita checo también atraviesa el pongo y establece los orígenes del Marañón en la laguna de Lauricocha. En 1743, La Condamine atraviesa esta vía fluvial.
El 26 de octubre de 1869, la cañonera peruana BAP "Napo", al mando del teniente primero AP Manuel Melitón Carvajal Ambulodegui, logra remontar por primera vez el pongo de Manseriche no sin dificultades que obligaron a la nave a usar toda su fuerza.
En años recientes el pongo de Manseriche ha sido y es transitado con mayor frecuencia gracias a las lanchas a motor que cada vez imprimen mayor potencia a las embarcaciones. Es común apreciar embarcaciones con motores de 80 caballos de fuerza atravesar con facilidad este reto de la naturaleza.
En la actualidad los pongos no son sólo sinónimo de dificultad, peligro o aventura, sino que también señalan un potencial desarrollo energético por aprovechamiento de las caídas y la fuerza de las aguas, lo que permite, al menos en teoría, convertir esa energía hidráulica en energía eléctrica. De ello se tienen varios ejemplos en el Perú, donde las aguas del pongo del Mantaro han sido aprovechados por la central hidroeléctrica Santiago Antúnez de Mayolo, y las aguas del río Santa han sido aprovechadas por la central hidroeléctrica del Cañón del Pato para generar la energía que necesitan, respectivamente, las regiones del centro y del norte del Perú. autora : Maryaclerk Gomez